Loading...Todos conocemos el famoso aparato que utilizan los paramédicos que viajan en las ambulancias para resucitar a las personas que han tenido la desgracia de padecer un paro cardiaco. La versión de dicho aparato que todos conocemos consta de dos planchas manuales que se colocan sobre el pecho del paciente y que sirven para lanzar una descarga eléctrica que ponga nuevamente en marcha su corazón. El nombre de esta máquina salvavidas es desfibrilador.
El funcionamiento del desfibrilador es relativamente sencillo, ya que su única función es la de producir una descarga eléctrica. Sin embargo, para lograr la precisión en el tamaño de la descarga es necesario un gran trabajo de ingeniería eléctrica, así como de profundos conocimientos acerca del cuerpo humano y, sobre todo, del corazón. La rama de la medicina que se ocupa de diseñar esta clase de aparatos se conoce como electromedicina.
Un paro cardiaco se produce cuando, por cualquier motivo, el corazón se detiene y deja de enviar la sangre llena de oxígeno procedente de los pulmones hacia el resto del cuerpo. Al cabo de unos cuantos minutos, el resultado de un paro cardiaco es la muerte.
La finalidad del desfibrilador es reanimar el corazón, siempre que esto sea posible. Generalmente se utiliza en pacientes que han sufrido un traumatismo severo o cuando sus funciones vitales disminuyen al grado de que el corazón se detiene. Al recibir la descarga eléctrica, el corazón reinicia el bombeo de la sangre.
En ocasiones, el desfibrilador también pude utilizarse para eliminar las arritmias severas que pueden ocasionar hipertensión arterial, condición que favorece la aparición de aneurismas y la ocurrencia de infartos.
El tipo más conocido de ellos es el desfibrilador automatico externo. Éste es el que se utiliza en las clínicas y hospitales para reanimar a los pacientes. También se incluye como parte fundamental del equipo de primeros auxilios de las ambulancias, ya que es una herramienta necesaria para brindar atención inmediata en los casos de accidentes o infartos.
Otra clase de desfibrilador es aquél que se implanta como parte del mecanismo de los marcapasos. Éstos son aparatos que se colocan quirúrgicamente en la cavidad cardiaca y que sirven para dar masaje al corazón y reanimarlo. Se utiliza en pacientes que han padecido paros cardiacos o que padecen de arritmias recurrentes. En estos casos, el desfibrilador nivela el funcionamiento cardiaco y previene futuros infartos, así como las consecuencias de las hipertensión.
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