Embarazo, dentadura y salud


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No podemos negar que durante el embarazo el cuerpo pasa por tantos cambios que llega un momento en el que nos sentimos extrañas en nuestro propio cuerpo; tamaño, funciones, olores, secreciones, formas, todo cambia y se vuelve frágil, complejo y lleno de misterios. Algo que pocas mujeres hacen durante sus 9 meses es visitar al cirujano dentista para que nos de algunas recomendaciones y nos haga un chequeo de rutina, pues la salud dental afecta más de lo que podríamos imaginarnos.

La Universidad de Alabama recientemente reveló un estudio en el que se comprueba que las enfermedades de las encías pueden llegar a causar nacimientos prematuros dependiendo de la gravedad de la misma. Muchas mujeres que están pasando por un tratamiento de ortodoncia durante el embarazo tienen que extremar precauciones y cuidar la limpieza de sus aparatos para evitar la acumulación excesiva de bacterias y microbios que pueden trasladarse por todo el organismo.

Para facilitar las visitas al dentista, muchos ginecólogos facilitan pases al dentista durante todo el embarazo cada dos meses y en el caso de presentar algún daño o enfermedad en las encías se debe curar con medicamentos que no pongan en riesgo ni a la madre ni al bebé, sin embargo siempre es mejor acudir al dentista apenas nos hemos enterado de estar embarazadas para evitar daños graves.

Es común que mujeres con dentaduras saludables desarrollen ciertos problemas durante la etapa de gestación como la gingivitis, es algo normal pues todos los fluidos y la circulación cambia junto con la producción hormonal, todo el cuerpo está más sensible y por lo tanto las reacciones pueden ser más delicadas.

Se recomienda que la futura madre no escatime en visitas al dentista ni cuidados como la cantidad de cepilladas al día y el uso de hilo dental, pero también existen otro tipo de cuidados que podemos tener con nuestra dentadura que no tienen tanto qué ver con la cantidad de veces que nos lavemos como tener una dieta balanceada y rica en proteínas, limitar al mínimo posible los alimentos azucarados entre comidas (por difícil que parezca), beber agua o leche descremadas y evitar las bebidas carbonatadas, consumir infusiones descafeinadas, evitar el sedentarismo y no fumar ni beber alcohol durante el embarazo.

Todos los cuidados que podamos tener durante el embarazo no deben ser descartados pues el cuerpo pasa por 9 meses muy complicados en donde todo se hace más intenso y delicado.

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