Loading...Para una pareja que anhela tener hijos, la infertilidad puede ser una noticia devastadora que incluso pueda llevarlos hacia situaciones negativas como el maltrato psicológico o la separación definitiva.
Investigadores en fertilidad femenina han revelado que existen periodos de infertilidad en las parejas, que pueden ir de los tres a los cinco años, sin que esto signifique que nunca tendrán hijos juntos, por lo que se recomienda conocer las etapas y llegar a la aceptación de la situación para posteriormente asumir una paternidad mucho más deseada y madura.
Las 4 etapas son:
Entumecimiento: En esta etapa, la pareja desea intensamente tener un bebé, su deseo de ser padres es muy grande, pero comienzan a dudar si tendrán éxito alguna vez. Aquí las parejas se realizan análisis clínicos, intentos incansables, conteo de los días fértiles y demás situaciones que dejan cansada y entumida a la pareja.
Anhelo: Comienza a manifestarse la sensación de soledad en la que la mujer puede empezar a centrar su atención en otras mujeres embarazadas o en los niños pequeños a quienes mira con desdén y envidia para posteriormente evitar situaciones en las que tendrá que enfrentarse a su deseo insatisfecho, por lo que puede dejar de acudir a fiestas familiares, reunirse con amigas, evitar cargar bebés ajenos, etc.
Desesperación: Es una etapa muy difícil que puede durar alrededor de seis meses o más. Aquí puede empezar a surgir tensión, celos, culpa, ira hacia los que “tuvieron suerte”. Algunas personas se sumergen en la depresión y la falta total de esperanza, así como en el rencor hacia las personas que sí logran embarazarse.
Reorganización: Es decir, la aceptación de la situación, donde surge el deseo de reorganizar la vida y buscar una alternativa diferente para vivir.
Algunos expertos señalan que la experiencia de la infertilidad se parece al período del duelo, ya que ambas tienen en común la pérdida; en la infertilidad es la pérdida de un factor que es implícito en la sociedad: tener hijos parece ser algo obvio, la realización de los sueños de una mujer. Por ello, las mujeres con dificultades para concebir se sienten excluidas donde otras personas de su misma edad se centran en el papel de ser madres.
La pareja infértil suele vivir con la sensación de pérdida, no experimentan el embarazo, el parto o la lactancia materna n aunque lleguen a adoptar a un pequeño bebé y realicen su sueño de seguir el papel de padres. Por ello, para sobreponerse es necesario seguir un período de lamentación, similar al período del duelo, donde reciban el apoyo y la empatía de sus seres queridos, pues la ausencia del embarazo puede deberse a una serie de factores físicos, mentales y sociales: el estado de salud de ambos miembros, su calidad de su vida, los hábitos, el posible miedo inconsciente a la paternidad, el estrés, la ansiedad, etc.
Es importante romper el círculo vicioso de la infertilidad y la inestabilidad emocional, dejar de culparnos o a nuestra pareja y buscar ayuda psicológica para sobreponernos
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